El olor corporal lo tenemos todos y es inevitable. Cuando este olor se torna ofensivo las cosas cambian. Es una situación difícil y a veces penosa. Como bien sabemos el ultimo en darse cuenta es el que lo sufre. El sudor son ideales para que las bacterias que producen el mal olor se reproduzcan. Todos sudamos, el sudor ayuda a mantener la temperatura ideal en nuestro cuerpo y elimina toxinas. Tenemos cientos de glándulas sudoríficas en nuestro cuerpo. El sudor es una arma de protección de nuestra piel.
Aunque es imposible dejar de sudar no es imposible evitar el mal olor.
En las áreas donde más sudamos y menos expuestas a la luz es donde las bacterias se reproducen más rápido. Si estas áreas tienen pelo el problema es mayor.
Las axilas es una de las áreas problemáticas. Aquí tenemos abundantes glándulas sudoríficas. A veces el olor es causado por problemas metabólicos, infecciones, algunos medicamento y algunos alimentos que consumimos. Otra área propensa al mal olor es el área pubica.
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